Qué tiene de extraordinario salir al balcon?
Llevo minutos mirando desde aquí arriba el jardín y su hermoso puzzle de colores que no había detectado y tampoco había reparado en los tantos verdes que se entremezclan con espontánea hermosura en los tantos bordes y rincones de mi patio.
Me imagino siendo yo el regador de toda su extensión. Ocupando horas en eso. Pensando. Fresco, húmedo, distraido.
Tengo ahora sensación de domingo y es martes.
Desde aquí se aprecian ordenadas mis acciones recién pasadas y se ven como entelequias los mañanas.
Tantas aves distintas se arriman a mi pasto cual su fuese su particular humedal.
Seguro encontraré más habitantes que los que ahora veo si los busco con calma entre las flores y las hojas y las ramas.
Calma. Mucha calma.
Se ve plácida la vida desde este balcón..
Y qué tal si subo a vivir aquí? Pienso.
Y que tal si me dedico a reparar en todo aquello no veo sino desde este balcón.? Concluyo mejor.
Quizá adoptar un modo balcón en mi ser y llevármelo asi.
Sería otra forma de vivir la vida.
Mmmh!
La que me resta.
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